Por Karla Rivas.18 de Septiembre. Tomado de Contra Punto.
El gobierno debe aprovechar estas herramientas para proporcionar información constante y transparente, desarrollar negocios y facilitar la comunicación con la ciudadanía
SAN SALVADOR - La transparencia gubernamental es un tema que ha tomado la agenda informativa nacional. El debate en torno al anteproyecto de Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública está, desde 2008, en el seno de la Asamblea Legislativa. El grupo promotor de la citada ley, formado por la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), la Universidad Centroamericana (UCA), Fundación para el Desarrollo Económico (Funde), Asociación de Periodistas de El Salvador (APES), Periódico Digital El Faro, Asociación Salvadoreña de Radiodifusores (Asder) y el Instituto Iberoamericano del Derecho Constitucional, ha propiciado la discusión de este anteproyecto, sin lograr avance alguno en el Congreso salvadoreño.
A pesar de no contar con el marco legal correspondiente, a partir del cambio de gobierno En El Salvador se han dado señales de lucha contra la corrupción y la falta de transparencia. Se han impulsado eventos de rendición de cuentas que llevaron a cabo casi todas las instituciones públicas al cierre del primer año de gestión, en los cuales se daba a conocer información de ejecución presupuestaria, despidos y contrataciones, principales proyectos desarrollados, en proceso y a futuro, entre otros..
Otro punto interesante que trajo la alternancia es el descubrimiento de importantes actos de corrupción, como el sancionado en el Ministerio de Obras Públicas con el manejo de los fondos destinados para el Boulevard Diego de Holguín.
Sin dar tanta importancia al pasado y abonando al futuro, el gobierno de El Salvador está potenciando el desarrollo de las TIC o “Tecnologías de Información y Telecomunicaciones”, recientemente el gobierno lanzó el sitio Web http://elsalvador.e-regulations.org/ con información de país útil para procedimientos de inversión extranjera. Asimismo, con este gobierno nace la Dirección de Innovación Tecnológica e Informática (ITIGES), dentro de la Secretaría Privada de la Presidencia. Esta Dirección, ha liderado entre otros proyectos, la estandarización de sitios Web gubernamentales, exigiendo que dentro de los más de cincuenta estándares internacionales de calidad de sitios Web, se incluyan las redes sociales de “Facebook”, “Twitter” y “Youtube”.
De esto, precisamente se trata el presente artículo de opinión, de la importancia de las redes sociales en la transparencia gubernamental. ¿Qué tan importante puede ser que las redes sociales estén presentes en los sitios Web de las instituciones gubernamentales como para que sea un estándar de calidad exigido internacionalmente para sitios Web? Hace unas décadas podría no haber sido tan importante, pero en esta era de la información y transparencia en la que vivimos se vuelve vital para la sanidad del sistema social.
Las redes sociales forman parte de la Comunicación 2.0, la cual a diferencia de la Comunicación 1.0, maneja reciprocidad del mensaje, no se trata de una comunicación unidireccional sino bidireccional, ahora sí importa lo que nuestro público quiere expresar, lo que piensa y opina. El compromiso ahora es mayor, dado que además de escuchar a nuestro público se le deben dar respuestas que le satisfagan, y de esta manera, nos permita posicionarnos positivamente ante él, como una empresa o institución responsable, transparente, que le comprende.
Instituciones públicas como la Superintendencia de Competencia, Asamblea Legislativa, Ministerio de Agricultura y Ganadería, Ministerio de Economía, Fondo Social para la Vivienda, entre otras, ya están en las redes sociales. A través de estas, están llegando a un público que probablemente no lee periódicos, no ve las noticias, no escucha noticieros radiales, pero sí está pendiente de las actualizaciones de sus contactos en Facebook, de los “tweets” que envían sus contactos en Twitter o de los nuevos videos en Youtube.
Muchas instituciones gubernamentales y empresas aún les temen a las redes sociales. Así como estas son una oportunidad para hacer llegar los mensajes a nuevos públicos, también abren naturalmente una ventana de exposición que permite recibir crítica (no siempre constructiva) que se tiene más controlada o es menos pública cuando no se está en estos grupos o redes sociales.
Entonces viene la duda, o se está fuera y seguro pero sin acercamiento a la innovación, o se está dentro pero con el riesgo a la crítica y al cuestionamiento. En esta era es imperativo estar dentro de las redes sociales y dar respuesta a la crítica mediante el mejoramiento constante y el trabajo expuesto con la mayor transparencia posible.
Veamos un ejemplo. La semana pasada en el “wall” de la Superintendencia de Competencia, una empresa colocó un mensaje donde criticaba a la institución por no cobrar las multas impuestas en 2008 a las harineras y las gasolineras. A unos minutos de haber comentado esto, muchos de los contactos que vieron el mensaje le dieron “Me gusta” al comentario.
La Superintendencia, lejos de callar y dejar una mala imagen para sus demás contactos, tuvo la oportunidad de contestar y aclarar la situación explicando que no es la responsable de cobrar las multas impuestas, sino que corresponde por Ley a la Fiscalía General de la República cobrar dichas multas, y que motivada por las solicitudes realizadas por la Superintendencia de Competencia, la FGR ya empezó a cobrarlas. Ante esta respuesta la empresa que había colocado el comentario respondió felicitando a la institución e incentivándola a seguir con su trabajo.
Lo que podría haber sido una crisis se convirtió en oportunidad. El comentario negativo de la empresa podría haber sido la duda o el pensar de muchos otros contactos, sin embargo, gracias a la aclaración que hizo la Superintendencia el comentario negativo sirvió para quitar las malas percepciones de los usuarios que comentaron al respecto.
Lo novedoso ahora es que la Superintendencia de Competencia lanzó esta semana su cuenta en “Twitter” a través de la cual estará informando constantemente a sus contactos sobre sus actividades, si está realizando una conferencia de prensa, entrevista, lanzando cierta publicación, dando a conocer la resolución de un caso, etc. Esta será una nueva herramienta de comunicación que complementará comunicados de prensa, sitio Web, presencia en medios de comunicación tradicionales, charlas, entre otros. El perfil de la SC en Twitter, al igual que las otras redes sociales en las que está presente, dará la oportunidad a los contactos de la Superintendencia de conocer más a fondo su labor y ser testigos del interés de la institución hacia la transparencia de su gestión.
La revolución de las redes sociales ya inició, el gobierno debe aprovecharlas para poner al servicio de la ciudadanía información constante y transparente, para desarrollar negocios, solucionar problemas, facilitar la comunicación y el acercamiento entre el gobierno y la ciudadanía e incluso para desplegar una mayor oferta de servicios en línea.
Esperemos que este interés hacia la transparencia se generalice y permita a los salvadoreños conocer más de su gobierno y crear un entorno más participativo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios que incluyan ofensas o amenazas no se publicaran.