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2010/09/13

El Faro - "Hay algo raro: como que se hizo el favor de difundir la amenaza" - ElFaro.net El Primer Periódico Digital Latinoamericano

 Lidera una de las gremiales más influyentes en el sistema de transporte de pasajeros del país, cuya representación, en el gran San Salvador -dice- alcanza entre el 35% y el 40% del total de rutas. El martes 7 de septiembre, mientras Catalino Miranda, su eterno rival en el sector, convocó a un paro por las amenazas recibidas por supuestos pandilleros, el presidente de la Asociación de Empresarios de Autobuses Salvadoreños (AEAS) llamó a la calma y rechazó el paro. A su juicio, las condiciones de alarma eran exactamente las mismas que sufren día a día a causa de las extorsiones. Y revisando los hechos de los días previos y la conducta de otros dirigentes del transporte público, no puede sino decir que hubo conductas raras.

Por Daniel Valencia Caravantes.13 de Septiembre. Tomado de El Faro.

A inicios de este año, AEAS, su gremio, convocó a un paro del transporte por el incremento de los asesinatos y extorsiones al sector. A ese paro no se sumaron Catalino Miranda y su gremio, aduciendo que no había por qué dejarse intimidar. ¿Cómo interpreta que hoy él haya convocado a este paro de buses, por tres días, tras las amenazas de pandilleros?
Aquí estamos en una situación compleja: el presidente no estaba, el vicepresidente es el ministro de Educación. No tenemos designado a la presidencia. No había gobierno. Pero yo diría: ¿cómo tuvieron la capacidad de coordinar esto cuando el gobierno estaba acéfalo? ¿Por qué lo finalizan justo al regreso del presidente? Hay mucha tela suelta. Hay demasiados cabos sueltos. Lo raro es que él (Catalino Miranda) se reúne con la gente de seguridad. Hace poco apareció diciendo, hace unos días, que la seguridad había mejorado considerablemente. Lo dijo cuando nosotros estábamos denunciando que probablemente haríamos alguna medida. Y del Ministerio de Seguridad los convocaron a ellos. Y justo en ese momento, información que yo tenía de adentro de la Policía me decía que la incidencia de problemas de delincuencia había incrementado un 40%. De hecho, hace un mes teníamos más muertos que el año pasado. No sé cómo podía salir diciendo que las cosas habían mejorado.

Cuando en AEAS se enteraron de las amenazas, el martes 7, ¿qué hicieron?
Cuando me enteré de esto, a las 3 de la tarde, le hablé a una persona que está muy cerca al Presidente, colaborando con él, y le dije que los mareros estaban convocando a un paro. "Háblele al presidente y que haga algo", le dije. Él me respondió que el presidente no estaba y tengo entendido que habló con el ministro de Seguridad. El problema es que el ministro Melgar ha demostrado tener una incapacidad sin precedentes.

¿Entonces su gremio cuánto tiempo tardó en decidir no sumarse al paro?
Inmediatamente después. Estábamos sin respuesta y la gente mía comenzó a llamarme. "Cálmense", les dije. "¡Si siempre no nos matan, pue!"

Cuando dice “los mareros nos convocaron a un paro” se refiere a la amenaza hecha por supuestos mareros para que los motoristas no salieran.
Claro, porque repartieron hojitas volantes. Y la información vino de compañeros a los que les han matando motoristas. Pero la orden que di es que nosotros no podemos (dejar de trabajar). ¡De paso les estamos pagando, y nos están utilizando como mecanismo de presión! Yo no lo alcanzo a comprender. Y si se fija en otro detalle, el mismo señor (Catalino) Miranda fue quien salió felicitando al gobierno por la aprobación de la ley antipandillas. Hay una serie de actos bien raros en este tema.

¿Me puede decir con cuál funcionario habló?
No. Es que no es funcionario. Es alguien que habla con el Presidente.

¿Gerardo Cáceres?
No lo voy a decir. Pero sí le advertí qué estaba pasando.

¿Ustedes y sus motoristas, que lo sufren día a día, cuándo y cómo se percatan de que una amenaza en su contra es cierta?
Hay algunos casos que no se sabe. Hay algunos que son simples extorsionistas; en otros hay hasta transportistas metidos en esto. Hay caso en que hay motoristas o trabajadores metidos en esta situación. Lamentablemente cuando lo íbamos a denunciar a la Policía, más tardábamos en ir a poner la denuncia en que lo supieran. Hay complicidad de parte de algunos policías. La Policía está infiltrada. Hasta decían que algunos miembros del ejército estaban extorsionando también. Esta es una situación compleja, y desde hace tiempo vengo sosteniendo que el punto de la delincuencia es que es un negocio. Y quizá el negocio más rentable. La Cámara de Comercio apareció diciendo que se gastaban más de 2 mil millones –anteriormente dijeron que fue 3 mil millones-; si un guardia de seguridad una empresa a uno se lo vende en 500 dólares y a los guardias les pagan 120 dólares, o sea que les quedan más de 300 dólares de utilidad por guardia de seguridad.

Corríjame si me equivoco, pero entiendo que el sistema de extorsión a los empresarios del transporte funciona así: una pandilla le cobra por salir de un punto A y otra (o la misma) por transitar en un punto B.
Y hay rutas que hasta en tres y cuatro puntos.

¿Eso funciona todos los días?
Conozco casos que hasta cheques dan: semanales, mensuales. Es como una cuota.

En estos tres días de paro, ¿los transportistas que están extorsionados siguieron pagando?
La pagan igual. Peor les sale estar parados, porque después igual les terminan cobrando. Es uno de los razonamientos que hacía: ¡igual no nos matan, igual no nos queman las unidades!

¿Viven amenazados todos los días?
Por eso no le encuentro la lógica a por qué parar.

Puede existir una amenaza más fuerte que...
¡¿Y no nos están quemando y amenazando día a día, pues?! ¿A cuál amenaza se refieren, si ya la tenemos y la seguirán haciendo?

¿Cuántos buseros van asesinados este año?
Más de 100. El año pasado fueron alrededor de 140.

Cuando quemaron un microbús en Mejicanos, nadie en el gremio de transporte convocó a un paro por temor a la seguridad de sus agremiados. ¿Qué puede ser más fuerte que eso como para que hoy sí convocaran a un paro?
Hay algo raro. Como que si hubiera complicidad, como que se le estaba haciendo el favor a difundir esta situación.

¿A su juicio, alguien se prestó para causar esta alarma con un objetivo que no sabemos cuál es?
Hay una serie de factores que han pasado últimamente: tenemos la masacre en México, el montón de dinero que hallaron en los barriles, una seguidilla de cosas que uno se queda preguntando qué está pasando. Es complejo. Es difícil precisar o aventurado decir algo. Pero hay cosas a las que no se les encuentra lógica.

¿Cuántos agremiados tiene AEAS?
Por razones de seguridad no se lo puedo decir.

Si dividiéramos la capital en porciones de un pastel del sector, ¿cuál porcentaje tiene AEAS?
Entre buses y microbuses un 35%, 40%.

¿Y el resto?
En otras gremiales.

¿Si AEAS tiene un 35%, 40%, Fecoatrans cuánto domina?
Hay un grupo... si usted va a Santa Tecla, es el sector donde él está. Pero ahí hay otros sectores que ni lo quieren ver.

Vaya, pero con su llamado a paro, Catalino Miranda frenó al menos la ciudad capital.
Ahí es la contradicción porque él no paró. Sus unidades trabajaron.

¿Cuáles son esas unidades?
La 42, Acostes y las “Selenas”. Unos microbuses que así dicen y son propiedad de él. ¿Cómo es que convoca a un paro y él sigue trabajando al siguiente día? ¿Le pensaba sacar alguna raja? ¿Tenía un compadre hablado?

Independientemente de eso, el llamado a paro tuvo poder de convocatoria.
Es que eso no es poder de convocatoria. Mire, si a usted le dicen que si sale a trabajar lo van a matar, ¿saldría? Aquí no pararon los transportistas. Aquí no ha habido un paro de transportistas. Los motoristas por temor guardaron las unidades. Si usted va a preguntar a todos los motoristas: levante las manos quienes quieran morir... nadie las va a levantar. Aquí hubo una cadena de hechos: queman otro microbús en la noche, matan a uno de la 109... y en la mañana llegan papelitos amenazantes a los motoristas. Eso genera ansiedades y temores.

Los hechos de la víspera del paro fueron lo suficientemente fuertes para provocar el paro.
Para el motorista. Si mató un par de personas un día antes, y después le llevo un papel donde le digo que lo voy a matar, ¿cuál sería su reacción?

Ahora, de eso a convocar un paro hay una gran distancia.
Hay una gran distancia.

¿Qué tan fuerte tiene que ser una amenaza como para irse a paro?
Separemos las amenazas de las realidades. ¿Cuántos muertos van hasta ahorita? Más de 100. No es un hecho aislado. El año pasado mataron alrededor de 140. Ahí no es un salveque, en buen salvadoreño. Este año mataron a uno de mis mejores amigos, que era transportista.

¿La decisión final de si salgo o no en mi bus es del motorista o del empresario?
Es del trabajador. Ahora: ¿cuál fue la reacción gubernamental ante esta crisis? Ofreció el ministro que si nos queman las unidades “se las vamos a reponer”. No hubo reacción.

¿Qué factor influye para que motoristas de un sector hagan el paro, y motoristas de otro salgan a trabajar? ¿Valentía?
Hay algunos que llegaron a la reflexión: “De algo hay que morir, de hambre o de un balazo”.

¿Qué influye para que a uno de los líderes del sector transporte una amenaza le provoque tanto temor que convoca a un paro, y al otro líder del sector no?
Más creo que él (Catalino Miranda) como que se prestó a la jugada. Históricamente él es un hombre que le ha buscado la raja a todo esto. Yo estuve en una reunión donde estuvo Rodrigo Ávila y René Figueroa, y donde él confesó que tenía contactos en Zacatraz (el penal de máxima seguridad en Zacatecoluca) para saber si él era el siguiente o no. Y lo dijo ante varias personas. ¿Quién puede tener contactos a ese nivel? Yo no.

En el último gobierno de Arena, ustedes se reunían en una mesa de seguridad para tratar el tema de las extorsiones. ¿Qué pasó con esas reuniones?

Yo dejé de participar desde que él confesó que tenía contactos (en Zacatraz).

¿Y hoy cómo hacen ustedes para manejar el tema de seguridad con el gobierno?
Por la postura que hemos tenido con el Viceministro, por la discusión del aumento del subsidio o el incremento de la tarifa a 45 o 50 centavos no ha habido reuniones.

Vaya, AEAS ya no se reúne en una mesa con el gobierno para tratar el tema de seguridad.
Es que mire, en la mesa que hay, hay un conjunto de serviles del viceministro. El presidente dijo que los funcionarios iban a estar por meritocracia. ¿Usted como salvadoreño cuál mérito le da al Viceministro de Transporte?

No lo conozco. Sólo sé que fue diputado y candidato perdedor a la comuna de Santa Ana.
Y fue presidente de la Comisión de Obras Públicas de la Asamblea Legislativa en alguna ocasión. Pero desde que asumió como viceminsitro, ¿cuáles son los progresos que usted ha visto? ¿Qué ha mejorado? Se iba a oponer a un montón de cosas, dijo que no iba a autorizar mototaxis; ya autorizó más de 5 mil. Dijeron que los taxis no los iban a autorizar; ahí está autorizando otro puño. Todo lo está haciendo al revés.

¿Quién es el interlocutor de AEAS en el tema de seguridad?
No tenemos. Estamos tratando de hacer nuestros propios esfuerzos. Hay cosas que no puedo comentar públicamente, pero sí estamos haciendo nuestros propios esfuerzos.

El ministro Melgar dijo que aprovechando la situación del paro algunos transportistas pidieron revisar el subsidio.
A mí no me convocaron. Mis declaraciones fueron: yo no paro, no tengo por qué estar acatando (ese llamado).

¿Quién se reúne con el ministerio de Seguridad e hizo ese planteamiento?
La mesa del Vice ministerio en donde hay personajes que ni son transportistas.

¿Quiénes?
Fecoatrans, Casit, la Cámara Tecleña, el sector femenil... grupos que ni tienen personería jurídica y que ahí tiene el Viceministro opinando y definiendo el rumbo del sector transporte.

El presidente Funes dijo que a los transportistas el gobierno les ha ofrecido seguridad permanente, no para tres días. ¿Esto es cierto?
No es cierto. Le voy a hacer un cálculo: hay 15 mil unidades de pasajeros, aproximadamente. Usted necesita, por lo menos, un hombre en la puerta del conductor y otro atrás: dos hombres por unidad. ¿Cuánto le suma multiplicado por unidad? 30 mil hombres. ¿Cuántos policías hay? Ni 20 mil, y con turnos de ocho horas. Si lo reduce a los turnos, le queda la tercera parte. Osea que en realidad hay 7 mil policías. ¿Qué puede hacer con 7 mil policías? Ya lo he dicho: si me dejan resolverlo a mí, la seguridad del transporte la puedo resolver mañana. Si me dejan hacerlo. Pero eso tiene un costo para la población. ¿Me van a permitir trasladar ese costo, como se lo permiten a las empresas? Yo puedo poner dos hombres por unidad, pero eso me genera alrededor de 5 centavos extra por pasajero.

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