Esta mañana el presidente Funes anunció una reforma al sistema de salud, que implicará un aumento presupuestario para la cartera de salud de 100 millones para el próximo año. Además, se aumentará gradualmente en un 58% la planilla de empleados en la salud pública hasta el final del quinquenio.
Jimena Aguilar.16 de Septiembre. Tomado de El Faro.
Durante el discurso de conmemoración de los 189 años de independencia en la Plaza Libertad, el presidente Mauricio Funes anunció este miércoles que su plan en el área de salud incluye un incremento presupuestario de más de 100 millones de dólares para 2011 y la incorporación gradual al sistema público de salud de "14 mil profesionales" hasta el final del quinquenio.
El presidente, que hace más de un año anunció una reforma integral a los servicios estatales de salud, dio este miércoles algunos detalles del plan, en lo que ocupó parte de su discurso. Enmarcó el proyecto en el hecho de que la la buena atención en salud es fundamental en uno de los países con mayor desigualdad del mundo y por eso hay que priorizar un buen servicio a los más pobres. “El decil más alto de la población, el de los más ricos, ha recibido el 23% del gasto social de los gobiernos que nos precedieron, mientras que el más pobre sólo ha recibido el 18%”, dijo.
Según el gobernante, la reparación de esta injusticia empezará por el área de salud.
El Sistema Nacional Integrado de Salud será un programa enfocado a la descentralización de los servicios de salud y en mejorar su calidad. Hasta el gobierno anterior, los hospitales cobraban "cuotas voluntarias" a los pacientes y estos tenían que pagarlas obligatoriamente. Asimismo, el sistema se ha caracterizado por un crónico déficit en la provisión de medicamentos, y el gobierno anterior decidió recortar la canasta básica de medicinas en un esfuerzo por lidiar con obligaciones financieras en otras áreas.
El gobierno de Funes decidió eliminar el cobro de las "cuotas voluntarias", pero eso tuvo el efecto inmediato de que los hospitales estatales dejaron de proveer algunos servicios que se financiaban con esos pagos. Asimismo, el problema de la carencia de medicamentos persiste.
Según el presidente, el cambio en el sistema será radical e implicará, por ejemplo, que la atención médica se llevará al paciente y no al revés.
La ministra de Salud, María Isabel Rodríguez, luego explicó que el objetivo es tratar las enfermedades cerca del lugar de vivienda del paciente, ya sea en la unidad de salud o en su casa si el paciente no puede trasladarse. Si la enfermedad es de mayor complejidad este sería trasladado a un centro de salud del siguiente nivel.
La reforma implicará también una mejora en la calidad de la atención de la salud y para eso están en un proceso intenso de capacitación de los diferentes grupos que participan en la atención al paciente.
Además de mejorar la calidad de la atención se implementará un sistema de emergencias. “Toda la red de emergencias del país se pondrá a disposición para que ambulancias totalmente equipadas lleguen a domicilio en un breve lapso de tiempo, cuando sean requeridas”, dijo Funes.
La ministra añadió que las ambulancias estarán equipadas de tal forma que permitan tratar los problemas en el sitio y no solo trasladar al paciente de un lugar a un hospital. “Solo lo que no puede en último término resolverse, hace que la ambulancia se lleve al hospital especializado”, dijo Rodríguez.
Esto implicaría una disminución en la recarga del sistema nacional del país, lo cual mejoraría las condiciones de hacinamiento dentro de los hospitales. En el hospital Santa Teresa, de Zacatecoluca, que estaba incluido en el proyecto de reconstrucción de los hospitales dañados por los terremotos de 2001, muchas veces dos pacientes tienen que dormir en una cama por falta de espacio y no hay condiciones mínimas que garanticen salud a la población que atiende. En gran parte, debido a que el hospital debió haber estado listo hace más de un año pero por una mala administración del programa aún no se termina.
Para poder llevar a cabo el Sistema Nacional Integrado de Salud el Ministerio de Salud se requiere dinero y según Funes el presupuesto de 2011 incluirá un centenar de millones de dólares adicionales a los 390 que el Ministerio tiene asignados este año. Sin embargo, Rodríguez aclaró que de estos 100 millones 66 en realidad están ya incluidos en el presupuesto del próximo año y que el Ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, se ha comprometido a dar el resto del dinero en cuotas a medida que avance el año.
Este incremento del presupuesto es parte de un esfuerzo por aumentar los fondos de la cartera de salud en los años que restan para terminar la gestión de Funes. “Por ejemplo, si ahora tenemos un presupuesto que ha aumentado un 30%, ya el siguiente año solo va a aumentar 10% y el siguiente un 7% porque va a sostener lo que ahora nos están dando”, dijo Rodríguez. Si se cumplieran las cifras que menciona la ministra, el presupuesto de Salud en el año 2013 sería de cerca de 600 millones de dólares, es decir que aumentaría en 200 millones respecto del presupuesto actual.
Ese dinero debería servir también para financiar la contratación de personal técnico que según Funes serán 14 mil los que se incorporen en los próximos cuatro años. Por ahora, en el rubro de la salud público hay aproximadamente 24 mil empleados, entre personal técnico y administrativo, y los 14 mil anunciados significaría un 58% de aumento.
Estos nuevos profesionales se integrarán en los tres distintos niveles de atención. El sistema de salud está dividido en tres niveles. El primero se refiere a la atención en unidades de salud, que también se apoyarán con los equipos comunitarios de salud familiar. El segundo a la red nacional de hospitales, conformada por 27 hospitales, y el tercero a los tres hospitales especializados del país: el Hospital Rosales, el Hospital Bloom y el Hospital de Maternidad. Los 14 mil profesionales serán repartidos en estos tres niveles de acuerdo con las necesidades que existan.
Según la ministra, aunque hasta ahora se está anunciando estos detalles, incluida la descentralización con los equipos comunitarios, esto ya se está implementando en los 74 municipios más pobres de El Salvador desde el 1 de julio. 63 ya están completamente equipados y en los otros 11 se ha hecho intervenciones limitadas.
Funes prometió que este proyecto se irá implementando gradualmente hasta cubrir todo el país al finalizar su mandato en 2014.
Funes anunció que este sistema es una reforma trascendental para el país porque llevará a las personas más necesitadas atención en salud, como parte de una política para superar los grandes niveles de desigualdad del país. “El decil más alto de la población, el de los más ricos, ha recibido el 23% del gasto social de los gobiernos que nos precedieron, mientras que el más pobre sólo ha recibido el 18%” dijo el presidente, quién anunció que la reparación de esta injusticia se empezaría por el sector salud.
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